martes, 7 de octubre de 2008

WE WERE TRAPPED




Me gustas mucho me dijo, y yo por mi parte y cambiando de tema respondí que tal vez el vino sería mejor si estuviera un poco mas frío. Seguimos colgadas de esa mirada unos segundos más y cuando el ambiente se comenzó a llenar de humo pregunte si no sería buena idea abrir una ventana, me miró confundida sabiendo que hacia hasta lo imposible por esquivar el tema. Nos recostamos en la cama, sin ninguna intención, con el deseo de que pase algo más. Y al ver el vacío que quedaba entre su cuerpo y el mío le aclaré que no iba obligarla a hacer nada. Se acerco con mas ganas de alejarse que de sentirme a su lado, y movió una ficha inesperada para mí. Y sin darme cuenta estaba yo encima de ella besándola, y al ver que sus manos recorrían mi cuerpo sentí ganas de quitarme lo poco que traía puesto ese día. Tengo un amante me dijo, y sus ojos se iluminaron como quien disfruta realmente de la función. Incoherentes resultaron sus expresiones en mis oídos. Pero a veces prefiero no hacerle caso a lo pienso, y esa sin dudas fue una de las veces. El fuego de la situación prolongo algunos días más el deseo, pero como todo en la vida cuando las cosas se hacen mas complicadas que precisas preferimos dar un paso al costado, y así fue que sucedió. Al ver que los sentimientos empezaron a surgir de algún lugar prefirió no ser presa de ese impulso una vez más. Una decisión brillante si me lo preguntan, pero tan cobarde que hasta llegue a sentir su vulnerabilidad ante de mi mirada. Y aunque no me opongo en absoluto debo confesar que a veces no llego a entenderla, quizá porque somos muy diferentes, o simplemente porque no hago mayor esfuerzo por comprender. Pero si en algo estamos de acuerdo es que es mejor que las cosas queden así.
/ Fuimos presos de un impulso... pero se acabó /

No hay comentarios: